The Tree Remembers es una urna de forma simple pero funcional y a la que su creadores le dan un marcado sentido como producto poético para recordar al difunto que escogido la cremación.
La urna se estructura en dos partes – un depósito para las cenizas y otro para colocar el sustrato vegetal donde enraizar una planta o el plantón de un árbol – aunque en realidad es una sola pieza.
La ventaja es que esta urna se pliega y queda plana por lo que tiene todas las características para ahorrar energía en su transporte.
Su diseño que en cierta forma recuerda una pequeña torre es también una invitación simbólica que cada cual según sus creencias puede imaginar.
Otra particularidad de esta urna es que las familiares podrían obtener una y colocar una parte de las cenizas. De este modo por un precio razonable otros familiares allegados podrían conservar también parte de ias cenizas del difunto si así lo dispusiera el fallecido.
En el compartimiento donde se pone el sustrato vegetal queda aislado del de las cenizas para facilitar la lenta absorción de las sales minerales que aportan las cenizas para el crecimiento de las plantas.
Cartón reciclable
Dado que la materia prima de esta urna es el cartoncillo (celulosa), una material reciclable y ecológico, una vez enterrada en el suelo con las cenizas en su interior, poco a poco se irá descomponiendo en el suelo.
De este modo el cartón junto a las cenizas queda fusionada con el sustrato que la envuelve permitiendo y facilitando el crecimiento de la planta que hayamos plantado.
Se publicita, no sin razón como una urna ecológica de ciclo completo (que sirve para el hospedaje de cenizas, la custodia de la urna en el hogar o el enterramiento de las cenizas con o sin un árbol o planta). La iniciativa de la urna The Tree Remembers añade versatilidad para facilitar el crecimiento de una planta con cenizas de difunto gracias a su diseño.
Toda ella está fabricada en cartón por lo que es claramente una urna biodegradable y reciclable. Otra característica a señalar de esta urna es que por su diseño se pliega y, por tanto, facilita el transporte ya que optimiza el volumen.
Esta ingeniosa urna cumple pues con dos criterios ecológicos muy interesantes, es de cartón, un material que se composta fácilmente y permite ser repartida entre varios miembros de la familia.
Versión para cenizas humanas y de mascotas
Existe una versión de 3 litros y una de 1 litro (pensada sobretodo para las cenizas de las mascotas). Su otro interés es abre la posibilidad a ser compartida como ocurre con las llamadas urnas divisibles que también fabrica Sortem.
Los expertos en duelo aseguran que ver creer una planta sumergida en las cenizas del difunto es sin duda una ayuda imprescindible a la despedida y que el seguimiento del crecimiento vegetal es cómo seguir una nueva vida algo que es muy terapéutico.
Según sus promotores, la finalidad de esta urna es ofrecer una herramienta que contribuya a mitigar la ausencia, ya que viendo crecer el árbol, en cada nuevo brote de vida que aparece, permite que los propios recuerdos con la persona fallecida se consoliden.
Esta urna plegable fue galardonada con el premio Red Dot 2017 y es una realización de un estudio de diseño catalán.