Las funerarias norteamericanas han denunciado a las doulas de la muerte por ofrecer servicios de acompañamiento al moribundo. Su objetivo no era otro que utilizar los medios mainstream para difamar a una opción de morir más humana y compasiva.
La guerra de los cementerios aporta apuntes sobre una parte de la historia de España a partir del boicot de la Iglesia para impedir el entierro de personas fallecidas de otras creencias en los cementerios católicos. Una realidad que todavía a día de hoy tiene sus sombras.