La tumba de las luciernagas
La tumba de las luciérnagas está basada en la novela homónima de Akiyuki Nosaka, un superviviente de la Segunda Guerra Mundial que plasmó sus experiencias en esta obra. En la novela, el autor aborda la culpabilidad por la pérdida de su hermana, a quien no pudo cuidar debidamente tras la muerte de sus padres.
La historia gira en torno a Seita, un niño de 14 años, y su hermana pequeña Setsuko, de 5 años. Una historia en la que la muerte y el dolor por la barbarie bélica son omnipresentes.
Tras el bombardeo de la ciudad de Kobe, los protagonistas pierden a su madre y su hogar. Además, no pueden encontrar a su padre, oficial de la Armada Naval Imperial Japonesa. Ante esta trágica situación, Seita y Setsuko deberán sobrevivir por su propia cuenta.
Tras un breve estancia en casa de una tia suya, los dos hermanos deberán buscarse un nuevo espacio vital y se ocultarán en un refugio antiaéreo abandonado, el cual será el escenario de su gran penuria.
Su lucha por sobrevivir, con Seita cuidando de su hermana enferma, es una oda al espíritu humano y, a la vez, un emotivo mensaje a los olvidados.
La historia es de una crudeza impresionante y conmovedora que provoca un rechazo por el horror que siempre acompaña a la guerra. Las luciérnagas dan mucha luz de noche pero su vida es realmente corta.
La dura crueldad de la Segunda Guerra Mundial en Japón
La tumba de las luciérnagas nos obliga a enfrentarnos a la cruda realidad de la guerra y a reflexionar sobre la necesidad de concienciar a los más pequeños sobre la muerte.
Es una de las películas más impactantes con mensaje antiguerra que nos muestra los horrores humanos que conducen a la muerte y el dolor profundo.
La historia de la supervivencia de los dos protagonistas es también la de la imposibilidad de hacerle frente en solitario y sobretodo de la ignorancia por la escasa edad de Seita. Cuida a su hermana Setsuko con todo el amor posible, pero será el médico quién le advertirá que la única enfermedad de la pequeña es la malnutrición.
La vida sin familia en tiempos de postguerra llevó a la muerte a muchos huérfanos u olvidados que morían por las calles lentamente. La película es de animación, pero no es para el público infantil.
Una película de animación ampliamente premiada
La película obtuvo una mención especial en los premios Blue Ribbon, en 1989. También ganó el Premio a la Mejor Película y el Premio por los Derechos de los Niños en el Festival de Cine de Chicago, en 1994.
Años más tarde, en 2010, Isao Takahata fue premiado en el Festival de Cine de Animación de Locarno (Suiza) por toda su carrera. Isao Takahata falleció el 5 de abril de 2018, a la edad de 82 años