Bessie y Lee son dos hermanas que pese a no haberse visto en veinte años. Bessie se ha quedado a cuidar a su padre enfermo Marvin acostado permanentemente en una  habitación, inmovilizado en cama, desde que sufrió una embolia.

La hermana pequeña, Lee por su parte se marchó a Ohio con su esposo, pero está divorciada y apenas sabe tratar a sus dos hijos: Charlie y su hijo mayor, Hank, internado en un psiquiátrico por pirómano.  Lee ha sido incapaz de afrontar sus responsabilidades básicas como madre.

Un buen día, en una revisión rutinaria, diagnostican leucemia a Bessie, así que esta, aunque sea consciente del muro que se levanta entre ambas hermanas de más de 20 años decide recurrir a Lee ya que la única esperanza de curación pasa por el trasplante de médula de un pariente próximo.

Lee decide ayudar a su hermana y someterse a las pruebas médicas para ser donante en un trasplante de médula ósea para Bessie. 

Sin embargo, las pruebas no muestran compatibilidad para poder ejecutar el trasplante de médula ósea, así que Bessie tendrá que seguir con el tratamiento de quimioterapia.

Finalmente, Lee y sus hijos deciden quedarse a vivir para siempre con su tía y su abuelo. Ambas hermanas empiezan una nueva vida con la necesidad de rehacer su relación fraternal.

La película narra una historia de una cierta dureza emocional pero tratada con exquisita dulzura e inteligentes toques de humor. Una historia sencilla pero llena de reflexiones.

Cuando la enfermedad y la amenaza de muerte llama al Amor

La película nos muestra que sólo el Amor, con mayúscula, es lo que permite encontrar nuestra redención. Es el Amor el que salva la brecha entre una madre y un hijo. Y es el Amor lo que hace que una vida sea plena, más allá de las expectativas que quizás nos hubiéramos planteado para nuestra existencia.

La habitación donde yace Marvin es el símbolo de las dos opciones que nos ofrece siempre la vida. Puede ser una cárcel, un espacio destinado al sufrimiento y donde sólo duerme la enfermedad y el pesar, o puede ser convertirse en un lugar donde la vida fluya con amor y esperanza.

Con un plantel de buenos actores la película es un poliedro bien planteado para mostrar todas las caras sobre las relaciones familiares.

La película La habitación de Marvin está basada en la novela homónima de Scott McPherson y nos enseña a acompañar en el sufrimiento, especialmente cuando Bessie cuida de su padre y renuncia a su propia familia y a su realización personal.

Una historia sobre la enfermedad terminal, el perdón y el amor como catarsis para afrontar el dolor y la tragedia.