Génova
Colin Firth, Catherine Keener, Willa Holland, Perla Haney-Jardine, Hope Davis, Sara Stewart, Alessandro Giuggioli, Margherita Romeo
La ciudad italiana de Génova será el escenario en el que Joe y sus dos hijas, Kelly y Mary, buscarán emprender una nueva vida tras la repentina muerte de la madre en un accidente automovilístico del que la pequeña Mary se siente culpable.
Mientras la hija mayor, Kelly explora el lado oscuro de la ciudad de ese misterioso nuevo mundo, a Mary le persigue el fantasma de su madre vagando por las calles de la ciudad. Mary, no sólo ha sufrido la muerte de su madre, sino que también siente una culpabilidad que no puede expresar. Se resiste a la idea de que ella se ha ido. Aunque tal vez no se haya ido del todo. Tal vez las personas que más queremos nunca se van del todo.
Génova es una mirada al dolor, especialmente sobre el dolor de una joven hija que se siente culpable por la pérdida a su madre. Es una de las muertes del cine memorables porqué uno tiene la impresión que la niña no lo superará.
La cinta no solo explora el dolor, sino también la culpa y el perdón, y cómo estos tienen un propósito y efecto completamente diferentes cuando se ceban sobre un pequeño ser humano.
El guion serpentea en momentos como si de una película turística italiana por los lugares y la historia de Génova. El marido viudo coquetea, con bellas mujeres, pero no pasa nada.
Hay momentos en que uno se pierde ante el planteamiento que propone el film sobre la aflicción o cómo afrontar un trauma como es la muerte súbita por un accidente, pero es cierto que es precisamente esta narración inconclusa que permite la reflexión.
Llena de detalles
Es una película que deja más a la imaginación que lo que explicita. Con pocos elementos nos cuenta una historia en la que lo importante son quizás más los detalles que la historia propiamente.
Una mirada, un paseo callejeando por las profundidades de la ciudad o los silencios que emanan de sus almas, nos transmiten la soledad que viven los personajes.
La magia es que el espectador acaba compartiendo los sentimientos que brotan de los personajes de la pantalla. Son tantas las sensaciones y emociones que nos llegan a lo largo del metraje que, aunque no haya drama ni acción, uno no pierde la atención ni el interés.
Su director, Winterbottom explica, en las notas de producción del film, que se centró en el guion: "Uno de sus atractivos era hacer algo parecido a una radiografía de la vida familiar. Me gustaba la idea de una familia que se trasladaba a vivir a otro lugar, donde apenas conocen a nadie. Para mí, la película trata del amor que siente un padre por sus hijas y de la relación de las niñas entre sí. La muerte de la madre sólo sirve de punto de partida. Me interesaba más indagar en cómo siguen adelante con sus vidas, cómo se las arreglan y la repetición de las cosas diarias. En eso consiste ser una familia, en ser capaces de superar juntos el dolor."