cartel Burning Ghost VIF-ARGENT

Burning Ghost - Destello fugaz

Título original
Burning Ghost - Vif Argent
País
Francia
Fecha de edición
2019
Duración
104
Género
Fantástico, romance
Dirección
Stéphane Batut
Reparto

Thimotée Robart, Judith Chemla, Saadia Bentaïeb, Djolof Mbengue, Jacques Nolot, Antoine Chappey

Fotografia
Céline Bozon
Música
Benoît de Villeneuve, Gaspar Claus y Reno Isaac
Montaje
François Quiqueré
Producción
Mélanie Gérin, Paul Rozenberg para Zadig Films, en colaboración conLes Films du Losange
Distribución
Filmin
Estreno en España
2020 (Julio, Atlàntida Film Fest)
Público
Sinopsis

Con el sustantivo fantasma en el título en inglés uno podría ya imaginarse el argumento. Sin embargo, el título original en francés aporta otra visión puesto que Vif-argent és la denominación alquímica del metal líquido "mercurio".

Como comenta el director Stéphane Batut. "el título evoca al mercurio utilizado como ingrediente activo en la alquimia, un elemento denso pero a la vez líquido capaz de fluir y tomar infinitas formas, comparable a una chispa sigilosa, algo que se enciende en la noche como ocurre con los protagonistas, Juste y Agathe en la película,  además el título es también es el nombre del dios Mercurio, considerado en la mitología romana como el mensajero de los dioses que lleva las almas al más allá".

El fantasma guía

Juste es un joven que ha sido reclutado como barquero de almas al paraíso. Pero, como le dice una vieja alma "el paraíso es cuando ya no se tiene miedo a morir". Pero para Juste, este trabajo también es la oportunidad para saldar deudas pendientes con su pasado. De hacer por primera vez el amor con una mujer a la que quiso.

"Ya me he dado cuenta que no todo es real, que lo que vivimos no existe realmente. Es como un paréntesis, un secreto... y cuando dormimos son los sueños los que deciden". Esta reflexión de Agathe entronca con la visión que nuestro ser está conectado a un campo de conciencia universal como señalan algunas experiencias cercanas a la muerte, entre ellas las del Dr. Alexander en el libro La prueba del cielo.

Vif-argent, que podríamos traducir libremente como "escurridizo" evoca la propiedad del mercurio de desplazarse como líquido a la vez que conserva la forma. Es decir, ilustra la idea de un mundo después de la muerte, un espacio de experimentación capaz de mostrar mejor la vida que todos compartimos en su visión más cotidiana.

Más allá de la sombra del amor

La película se adentra especialmente, en lo que se refiere al amor y que se traduce en el romance que viven los protagonistas: Agathe y Juste; él más joven y sin experiencia de pareja y ella nostálgica por un amor de juventud que nunca acabó de realizarse.

En la película los protagonistas persiguen formas sombrías de su amor hasta reconocer que todo es una ilusión. El film juega por ello con la invisibilidad y visibilidad de ambos personajes. Y es que nuestra percepción del amor, del sosiego, de la felicidad no es real, se trata de versiones de sus posibilidades más o menos brillantes, pero versiones sombrías.

Es una película en la que el tiempo es circular, que este se repite cuando uno sueña, pero puede también que el otro esté ya muerto o al revés. De hecho al final de la película, una Agahte fantasma le señala a Juste desde el puente en el que se encuentra "Mira, somos nosotros allá abajo" y el responde "Sí, eso parece". 

Un poema visual lo-fi

En el anuncio del film advierten que se trata de un poema visual lo-fi (Low fidelity) en referencia a las grabaciones musicales donde predomina el uso de medios anticuados o de baja fidelidad de grabación, a veces como una mera decisión estética.

En este sentido Stéphane Batut emplea una técnica fílmica que da el aspecto de poco refinada, espontánea, aunque soportada por una soberbia fotografía a cargo de Céline Bozon y del hecho de que toda la película fuera rodada en el barrio parisino de Buttes-Chaumont que el director conoce a la perfección.

Un escenario urbano con toques de naturaleza que también le permite resaltar de forma implícita la fragilidad humana gracias a su diversidad poblacional así como de ambientes sociales del barrio.

El director reconoce que su película está hecha de collages, de historias que le han contado, que he transcrito, de ensayos que le han marcado y reconoce su influencia de otros cineastas franceses como Sacha Guitry (1885-1957), o Georges Franju (1912-1987) y por tanto de escenas de películas que le gustan.

El cine es a menudo una forma de soñar utopías y Vif-Argent lo es. No es la historia de un fantasma "quemado" sino de un sueño líquido metido en otro sueño. Donde no es fácil percibir si quién sueña está ya fuera del sueño o es al revés.

Puedes descargar el Pressbook  (en lengua francesa) de divulgación del film.

Trailer original en francés

Compartir :